PSG Jordan
Parisinos, baloncestistas y comprometidos
Diandra, Laura, Helena y Jérémy son cuatro personalidades comprometidas tanto con el mundo del baloncesto como con la comunidad parisina. Cada uno a su manera, todos ellos trabajan para mejorar la vida cotidiana de la comunidad parisina, intra y extramuros, y hacer que sus miembros estén cada vez más comprometidos.
Diandra es originaria de Sena Saint Denis, un departamento limítrofe con la capital francesa. De hecho, para ella venir de este departamento y poder representarlo en el equipo de Francia es un auténtico orgullo. Es más, para dar constancia de ello, decidió incluso jugar con el número 93, cifras con las que los franceses suelen referirse a este departamento por su código postal. Cuando no está dándolo todo en la cancha, Diandra dedica su tiempo a impulsar varios proyectos destinados a dar protagonismo a aquellos jóvenes procedentes de los suburbios que desean emanciparse, especialmente a las chicas.
Helena es del norte de París. Su vocación por el baloncesto comenzó cuando apenas era una niña. De hecho, es algo que le viene de familia. Ahora, ha decidido terminar sus estudios de secundaria en un centro académico estadounidense y probar suerte al otro lado del Atlántico. Cada vez que regresa a París, sólo tiene un deseo: convencer a aquellos jóvenes que quieren seguir su camino de que todo es posible si se tiene perseverancia.
Laura es una persona muy conocida entre los adeptos al baloncesto parisinos. De hecho, fue ella quien fundó IcanPlay, el primer medio de comunicación digital dedicado a promover el papel de la mujer dentro del mundo del básquet. Su objetivo: conseguir que las mujeres se sientan realizadas y orgullosas de sí mismas tanto dentro como fuera de la cancha. Para ello, Laura transmite este mensaje positivo y todo aquello que conlleva a través de las canchas parisinas.
Jérémy es entrenador personal, pero también asistente del equipo de baloncesto sub-18 de Francia. Su principal motivación es la de compartir los valores del baloncesto y el altruismo. Uno de sus mensajes preferidos y que no se cansa de repetir es que «todo el mundo puede conseguirlo». Para él, la clave está en la perseverancia y la ayuda mutua.
